Publicado en XatakaFoto el 5-1-2022:
2022 será un año fotográfico más, con sus cosas buenas y malas. Y como siempre dependerá de todo lo que nos rodee y de lo que hagamos nosotros como fotógrafos. Esta noche llegan los reyes magos, igual les hemos escrito una carta pidiendo cosas materiales, pero igual estamos a tiempo de pedir cosas que no les cuesten nada, más que nada por los tiempos que corren.
Este año ha sido muy complicado en todos los sentidos. Todos lo hemos pasado mal. Pero la fotografía ha estado ahí para ayudarnos a pasar los meses de confinamiento. Además, tiene una ventaja: es solitaria. Siempre sale mejor si vas solo. Puede que sea más aburrido, eso sí.
Así que vamos a buscar regalos gratuitos que podemos pedir, o que nos podemos hacer directamente, para que este año recién estrenado sea lo mejor posible desde un punto de vista fotográfico.
Los mejores regalos fotográficos que no cuestan ni un céntimo
Si te gusta la fotografía tienes por lo menos una cámara, un objetivo y un ordenador con algún programa para revelar tus disparos. Es verdad que todos queremos tener algo más para conseguir esa calidad con la que soñamos, pero no es posible. Así que aquí vienen propuestas.
Disfrutar del equipo que tenemos
Tenemos que aprovechar lo que tenemos hasta el límite. Con una buena técnica que podemos aprender y desarrollar seguro que podemos disfrutar de nuestro equipo hasta límites insospechados. Es un tópico, pero si eres bueno, da igual el equipo que tengas.
Uno de los mejores fotógrafos que tenemos en España, trabaja desde hace años con una cámara que muchos ahora menosprecian porque es una réflex. Y os puedo asegurar que a él le da igual, porque sabe lo que es realmente importante a la hora de ser fotógrafo.
Si trabajamos con nuestro material, con lo que ya tenemos, y nos dejamos de fijar en lo que tiene el vecino, seguro que avanzamos mucho más que con la compra de un nuevo equipo. Ya lo tendremos cuando la cuenta bancaria lo permita.
Leer los libros almacenados en tu biblioteca
Un libro nuevo siempre será bien recibido. Pero todos tenemos en nuestra biblioteca alguno que otro olvidado, que nunca hemos leído o que no entendimos en su momento. O que simplemente se quedó debajo de todos los que has ido comprando.
Un libro nuevo siempre será bien recibido. Pero todos tenemos en nuestra biblioteca alguno que otro olvidado, que nunca hemos leído o que no entendimos en su momento
Así que puede ser un buen momento para sentarte y revisar todo lo que tenemos. En estos días fríos puede ser un buen momento para ver si tienes algún ensayo sin estrenar, como el de Eduardo Momeñe, o algún otro clásico como el de Roland Barthes.
Puede que tengas algún que otro catálogo que te compraste con muchas ganas. Y te des ahora cuenta de los escritos que tiene además de las fotografías. Te sorprendes por la cantidad de información que tienen y te ayudarán con el primer regalo que hemos comentado.
La educación fotográfica
No entenderé nunca a la gente que busca la confrontación con los demás fotógrafos con tal de imponer sus ideas o simplemente por no estar de acuerdo con el contrario.
Se aprende mucho en las discusiones con fotógrafos y fotógrafas sobre cualquier tema. En las clases, en comidas y en encuentros puedes descubrir más cosas que en cualquier otro sitio sobre este mundillo. Y no todo el mundo tiene que estar de acuerdo contigo, sería muy aburrido.
Y siempre con educación y poniéndote en el lugar del otro. Esto es importante, de verdad. No tienes ni idea de lo que está pasando o de cómo le puede afectar. O a lo mejor no ha sabido expresar bien su opinión. O directamente tú no la has entendido.
Siempre admiro a las personas que alaban en público y critican en privado. Es algo que en las redes sociales se olvida
Siempre admiro a las personas que alaban en público y critican en privado. Es algo que en las redes sociales se olvida. Muchos se encargan de lanzar a sus huestes si ven que alguien dice algo con lo que no están de acuerdo. Y eso es peligroso. Y maleducado.
Si crees que un comentario en las redes puede ser hiriente, que no te gustaría que te lo hicieran a ti, no lo hagas. A lo mejor has coincidido con esa persona en alguna ocasión y puedes hablarlo directamente con él. De verdad que es un regalo que te puedes hacer a ti mismo y que te dará bastantes sorpresas.
Pasear sin buscar la fotografía perfecta
El tiempo es oro pero no para la fotografía. Una de las mayores frustraciones que se encuentran los fotógrafos que empiezan es que quieren conseguir la fotografía perfecta en su salida de fin de semana. Y puede que pase o puede que no.
Hacer una buena fotografía no es fácil, en absoluto. Da igual la cámara que tengas y los años que lleves con ella colgada al hombro. El único secreto es el tiempo que le dediques. Y aprender tan bien la técnica que te olvides de ella en el instante mismo que disparas.
Las imágenes que vemos día tras día son perfectas técnicamente, sin ruido, con la luz bien medida. Pero cada vez son más parecidas unas a otras. Ahora conocemos la ubicación exacta, tenemos los mismos conocimientos y vamos a tiro hecho. No arriesgamos para aprovechar el tiempo.
Un regalo que nos podemos hacer es intentar huir de las modas y fotografiar de otra forma, descubrir nuevos sitios y buscar nuestro estilo. No se trata tanto de disparar, sino de pescar (son dos maneras de enfrentarse a nuestra afición).
Hay que andar mucho, gastar suela, como decía un gran fotógrafo. Igual un día no conseguimos nada y al siguiente lo tenemos todo hecho en quince minutos. Vamos a olvidarnos de cargar kilos de material y vamos a simplificar. Yo lo intentaré con el móvil sin caer en el radicalismo.
O si eres de móvil intenta salir con una sin espejo o la réflex que tienes en el fondo del armario. El regalo es intentar salir de lo que conoces, si te apetece, y probar cosas nuevas.
En fin, que podemos hacer muchas cosas para mejorar nuestro trabajo sin gastar dinero. No quiero caer en mensajes de Mr Wonderful porque cada uno puede hacer lo que quiera, faltaría más (y sin necesidad de enfadarse ni criticar). Siento si ha parecido un artículo de autoayuda…
Lo bueno que tiene la fotografía es que, para muchos, es una afición y te permite actuar como te dé la gana. Y de verdad, que lo único que no hace falta es criticar por la espalda. Las cosas te irán mucho mejor y serás más feliz. Y las fotos serán mejores.